Foto: oncubanews.com

Un grupo de 70 emprendedores cubanos se reunió durante los días 25 y 26 de septiembre con empresarios cubanoamericanos y funcionarios estadounidenses. El motivo de la reunión fue buscar posibles soluciones para los obstáculos que aún impiden para unos, el libre acceso al mercado norteamericano, y a otros, la posibilidad de poder comerciar con Cuba.

Este es el primer encuentro de este tipo desde que el gobierno de la isla permitió la creación de empresas privadas en el año 2021. Las restricciones impuestas por el embargo estadounidense a la isla están en un momento de revisión, por lo que este acercamiento es un paso más para que los ciudadanos cubanos puedan crear negocios prósperos y rentables dentro de la legalidad.

Un futuro para el sector privado

Si bien el comercio con las empresas estatales sigue estando restringido por el embargo, el sector privado en Cuba se encuentra en un momento de auge, lo que ha tomado de sorpresa a no pocos habitantes de los Estados Unidos.

Es lógico que apoyando a una próspera comunidad empresarial en la isla mejoren las condiciones de vida del cubano de a pie, no solo por el acceso a productos y servicios sino por la creación de fuentes de empleo alternativas a las estatales. Uno de los impulsores de esta idea es el ex congresista Joe García, quien fue un elemento clave para organizar el viaje y dar la oportunidad a los emprendedores cubanos de conversar durante dos días en la firma de abogados Akerman LLP, con sede en Miami. Otro de los promotores del evento fue el exalcalde de Hialeah Raúl Martínez.

Este evento demostró que detrás de las pequeñas y medianas empresas privadas en Cuba están los rostros de emprendedores que buscan la normalización del comercio con los EEUU, que en palabras de García, «Estados Unidos es el mercado más natural para hacer negocios con Cuba».

¿Qué buscan los empresarios cubanos en Estados Unidos?

El grupo estuvo integrado por emprendedores de todas las provincias y sectores como el desarrollo de software, el transporte, la construcción, la fabricación de ropa y productos de belleza y la importación y exportación de alimentos.

El reclamo general fue fomentar el contacto directo con los proveedores, para reducir costos y precios al eliminar los revendedores de la ecuación; crear nuevos mercados y asociarse con empresarios norteamericanos para ampliar sus operaciones.

Cabe destacar que, pesar del embargo comercial con Cuba, se puede realizar importaciones de los bienes producidos por empresarios cubanos. Un paso de avance en la normalización de las relaciones comerciales con las pequeñas y medianas empresas privadas es la promesa de nuevas regulaciones por la administración Biden que permitirá a los empresarios privados cubanos abrir cuentas bancarias en Estados Unidos, lo que facilitaría pagar a los proveedores en el extranjero.

Los empresarios cubanos intercambiaron con los abogados de Akerman y funcionarios estadounidenses del Departamento de Estado, Tesoro y Comercio, que explicaron las regulaciones que permiten a las empresas norteamericanas exportar al sector privado cubano.

No es un proceso sencillo el sortear restricciones y solicitar las licencias correspondientes. Pero ya se va vislumbrando, sino un camino, por lo menos una clara intención.

«Que empresarios cubanos de ambos lados del estrecho de Florida se reúnan, intercambien, colaboren y exploren oportunidades conjuntas en Miami no es tan sólo histórico, es el futuro”, expresó Hugo Cancio, propietario de Katapulk.

Según Mike Fernández, multimillonario y ejecutivo del sector de la salud que dijo las palabras inaugurales del evento, expresó sobre los negocios privados en Cuba que «es el comienzo de algo monumental que cambiará el país».