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Tras el referendo popular que aprobó el nuevo Código de Familia con un 66,8% el pasado 25 de septiembre y su entrada en vigor, ya son varias las parejas del mismo sexo que han acudido a notaría para contraer matrimonio.
Para ellos, esta ha sido la posibilidad de hacer oficial y legal lo que ya el amor había probado como cierto. Ese es el punto de vista de la joven cubana Rocío Baró Guerra, que compartió fotos de su ceremonia en sus redes sociales, afirmando además que “Nos quedan todavía muchos sueños por cumplir y luchas por dar, pero por hoy, somos super felices. Nos casamos!!!”.
Los primeros en legalizar su unión bajo el nuevo Código de Familia fueron una pareja de hombres de Manzanillo, provincia de Granma, el día 3 de octubre, según informó el Centro Nacional de Educación Sexual (CENESEX). Alberto y José finalmente formalizaron su relación de 18 años ante notario.
Un código de Familia que legaliza el amor
El nuevo Código de las Familias modifica lo relativo al matrimonio “como la unión legal entre dos personas con edad y capacidad legal para ello”, permitiendo que las parejas del mismo género contraigan matrimonio en la Isla.
Esta primera ceremonia se realizó en el hogar de la pareja, en un ambiente familiar y rodeado de amigos. Más que una formalidad, la legalización del matrimonio igualitario extiende la protección legal de la pareja ante alguna situación de los cónyuges, respaldo de bienes adquiridos en común y derechos de alimentación y cuidado.
El jurista y vicedirector del CENESEX, Manuel Vázquez Seijido, ha expresado que de existir trabas o falta de información en notarías y registros civiles de Cuba que impidan a las personas del mismo sexo/género contraer matrimonio, estos deben ser denunciados, por constituir una violación de los derechos de las personas según el nuevo Código. Este contempla no solo el matrimonio igualitario, sino también la adopción por parejas del mismo sexo y la gestación asistida, entre otros.
Rompiendo conceptos arcaicos
Otro ejemplo de la aplicación de lo establecido en el nuevo Código de las Familias es la boda del artista Lázaro González con el teólogo Adiel González en Bolondrón, provincia de Matanzas, el 13 de octubre de este año.
Este último se vio forzado a romper con su iglesia bautista debido a su homosexualidad, para transformarse en un activista defensor de los derechos LGBTIQ+. Así, toma como una victoria personal el poder legalizar su unión luego de 10 años de relación, al decir “Siempre estuvimos esperando este momento porque ha sido un sueño”.
Hasta el 25 de octubre el matrimonio igualitario era legal solo en algunos países de América Latina como Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, Uruguay y varios estados mexicanos. Ahora Cuba se suma a esta lista, pero ha sido una lucha de muchos años contra viejos dogmas.
Incluso en pleno siglo XXI, la aprobación del nuevo código ha tenido una fuerte oposición de grupos religiosos conservadores y fundamentalistas, que bloquearon el intento de introducir el matrimonio igualitario en la Constitución aprobada en 2019. Pero tras 3 años de lucha, el matrimonio igualitario es una realidad.
Según Adiel, “No necesitamos una firma para ser felices, pero es hacernos reconocer en la sociedad que estamos bajo una relación como cualquier otro heterosexual y eso es importantísimo para nosotros”.